Planting The Seeds Of Degrowth - en espanol

Plantar Las Semillas de Decrecimento en Tiempos de Crisis
Por
Marula Tsagkari

Hay que buscar el hombre en lo que podamos encontrarlo. Cuando en su camino a Tebas Edipo encontrado la Esfinge, su respuesta a su enigma era: 'Hombre'. Esa simple palabra destruye el monstruo. Tenemos muchos monstruos que destruir. Pensemos en la respuesta de Edipo .

Estas palabras son del poeta griego Giorgos Seferis' discurso en el Banquete Nobel. Hoy en día son más relevantes que nunca, ya que la humanidad lucha contra un 'Sphinx contemporánea': el ideal utópico de un crecimiento infinito definido por los indicadores económicos y teorías. De esta manera prometeica de vida ha sostenido la idea de que el aumento de la riqueza era el 'Una píldora para curar a todos.'


Sin embargo, en los últimos años, se ha vuelto cada vez más evidente que los recursos son finitos y que el planeta no puede sostener un crecimiento continuo. Y al igual que, el ideal utópico empezó a desmoronarse. La última crisis económica mostró la cara más cruel del sistema capitalista insostenible. Ha quedado claro ahora, más que nunca, de que vivimos en un mundo absurdo, que a pesar de aumento de la riqueza, el desempleo y la pobreza están aumentando , los conflictos continúan, y la desigualdad sigue subiendo . En este contexto, la idea de decrecimiento apunta a una ruta alternativa, y establece un vocabulario para describir un nuevo mundo basado en la solidaridad y la cooperación.


Si bien la idea del decrecimiento es bastante antiguo (semillas se pueden encontrar en la década de 1970), el movimiento sólo ha comenzado a ganar terreno en los últimos años, especialmente en los ecos de la reciente crisis económica. Las Conferencias en Leipzig en 2014 y en Budapest en 2016 reunió a miles de científicos y ciudadanos con diferentes orígenes e ideologías incluyendo críticos de suficiencia orientado de la civilización, reformistas, idealistas pacifistas e izquierdistas libertarios. Sin embargo, todos parecen compartir la creencia común de que el modelo económico actual es insostenible, así como una visión de una forma diferente de vivir.


Tal vez porque el movimiento encontró su voz a través de la insatisfacción de la gente tras la crisis económica, muchos confunden decrecimiento con la idea de 'decrecimiento sostenible', que a menudo es sinónimo de recesión económica y la inestabilidad social. Por el contrario, el núcleo de 'decrecimiento sostenible' es el concepto de 'progreso', sino un progreso no relacionado con un aumento del PIB, la producción a gran escala, o el exceso de consumo.


Como Tim Jackson dice, 'Toda sociedad se aferra a un mito por el que vive. El nuestro es el mito del crecimiento económico'. Y precisamente este es el mito de que el movimiento por el decrecimiento pretende desmitificar.


Al mismo tiempo que el movimiento por el decrecimiento fue ganando terreno en el discurso público, mi país, Grecia, estaba viviendo la peor recesión económica desde la Segunda Guerra Mundial. Grecia entró en la UE en 2002 y desde entonces se unió a los privilegios de ser un miembro de la unión monetaria de la UE, lo que condujo a un rápido aumento en el PIB entre 2002 y 2008. Sin embargo, Grecia no pudo recuperarse de la crisis económica mundial y, en 2009, la deuda griega alcanzó un máximo de 310 400 000 000 €.


Desde entonces, el país ha sido atrapado en un círculo vicioso de los programas de rescate y las medidas de austeridad impuestas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), bajo la atenta mirada del gobierno alemán. Estas medidas llegaron con muchos costos. Los planes de austeridad incluyen recortes estrictos públicos (salud y educación), medidas en el sector privado (despidos masivos), el aumento de los impuestos y las pensiones reducidas. Estas decisiones aumento de la inestabilidad política y tuvo un costo social grave. El desempleo ha sido informado de que en el 23%, y el 45,7% entre los jóvenes (enero de 2017); mientras que hay más de 20.000 personas sin hogar (febrero de 2016). Por lo tanto, la crisis económica inicial se ha transformado en un multifacético social, política y ambiental crisis lo Geels llama un 'triple crisis', cada uno de los cuales está conectado a la otra.


En Grecia, estas interacciones se están convirtiendo en claro. Hubo un aumento en el número de eventos de smog debido al aumento del precio del petróleo, mientras que también fue un rápido aumento de la caza furtiva y la tala relacionada con fuertes recortes presupuestarios en materia de conservación observó .


En el idioma chino la palabra crisis está representado por dos símbolos. El primero significa peligro y, la segunda, la oportunidad. Es cierto que las crisis económicas son fenómenos complejos, y una forma de choque exógeno en la sociedad. Por otro lado, también son una oportunidad para desafiar la actual forma de pensar y que pueden abrir una puerta a un cambio profundo.


Como algunos partidarios del decrecimiento han afirmado, esta nueva era va a nacer de las cenizas de la presente sistema insostenible, o más específicamente, los movimientos sociales activos puede allanar el camino para que poco a poco un cambio más grande. La obra de Giorgos Kallis, Francois Schneider, y Joan Martínez Alier ofrece un punto de partida útil. Ellos afirman que una crisis puede ser visto como una oportunidad para discursos alternativos y las semillas se puede encontrar en las iniciativas basadas en la comunidad que pueden formar las piezas que, en el futuro, caben en un rompecabezas más grande.


Esta idea provocó mi interés y decidí enfocar mi investigación sobre la cuestión de una transición decrecimiento sostenible en Grecia, y en qué medida podría ser el resultado de este aumento de la participación ciudadana. Y tomando esto como un punto de partida, la idea que quiero plantear es que en Grecia, a pesar de la crisis (οr debido a la crisis) se pueden encontrar las semillas que pueden apoyar la idea de decrecimiento.


Las primeras semillas de una economía decrecimiento en Grecia


El compromiso cívico era más bien limitado en Grecia antes de la crisis económica. Por ejemplo, en 2005, la Encuesta de Civicus señaló que la sociedad civil griega es anémico, ya que estaba dominado por los partidos políticos y la familia. Sin embargo, a raíz de la crisis económica, el activismo cívico apareció como una respuesta espontánea a un aumento de la desigualdad social y la pobreza.


Aparte del aumento del número de ONG, nuevos grupos informales, basadas en la solidaridad y formaron estallaron movimientos y redes de base. En tiempos de crisis fue de una economía alternativa, paralela ' nació .


Sin embargo, sería un error suponer que esta nueva economía salió de la nada. Grecia es un país con un fuerte sentido de comunidad y una cultura de auto-organización. El farmacéutico, el carnicero, y el pescador del barrio son figuras integral de la cultura griega. Todo el mundo los conoce y sus tiendas son a menudo un punto de encuentro. Por desgracia, estas pequeñas empresas son también los más perjudicados por la crisis económica y las medidas de austeridad.


Entre 2008 y 2015, más de 20.000 pequeñas empresas locales cerrados en Grecia, según la Comisión Europea . Como respuesta a la ausencia de puntos de recolección locales, y la pérdida de puestos de trabajo, una serie de movimientos sociales y cooperativas surgió durante los tiempos de crisis.


Lo que es más, la idea de la cooperación ha sido siempre un elemento importante de la tradición griega. De hecho, las tradiciones griegas de cooperación pueden ser las más antiguas de Europa. La idea de la auto-organización se puede encontrar en la antigüedad griega en forma de sindicatos.


Cooperativas también estaban presentes, en una forma más avanzada, en el Imperio bizantino. Estos consistían en las uniones de los propietarios de tierras o ganado en los sistemas de producción y de gestión comunes. En este período fueron reconocidos por la legislación de León VI el Sabio y ha logrado una mayor autonomía, convirtiéndose en una parte vital de la economía.


Las cooperativas también estuvieron presentes durante el dominio otomano (1453- 1821) y tuvo un papel importante durante la guerra de liberación nacional de 1821. Durante este período nuevas cooperativas aparecieron en pequeños pueblos, donde pequeños grupos de productores conocidos como '' syntrofies (empresas o amistades) decidieron cooperar para evitar la competencia. En algunos casos eran incluso capaces de exportar sus productos a otros países europeos. 17Después de Grecia se convirtió en un país independiente las cooperativas permanecieron activos, trabajando para el establecimiento de un régimen democrático.


La revitalización del movimiento cooperativo de Grecia


Volviendo a la actualidad, el movimiento cooperativo griega sigue siendo una parte vibrante de la economía. Los números hablan por sí mismos, ya que en la actualidad hay más de 3000 cooperativas agrícolas , 14 bancos cooperativos y 48 cooperativas de Mujeres . Además, se pueden encontrar 23 de electricista, fontanero 33 y 41 farmacéutico cooperativas en todo el país.


Últimamente, la idea de las cooperativas ha aumentado una vez más en popularidad. La gente prefiere los productos de confianza y recordarles de su 'abuela en el pueblo'. También quieren apoyar a las comunidades locales. Ιn este contexto, las cooperativas ofrecen productos cuyas materias primas provienen directamente de la tierra de los miembros de la cooperativa o al pueblo, a menudo se basan en recetas tradicionales de las mujeres de las aldeas, y en la mayoría de los casos que empacar y promover sus productos por sí mismos.


En la isla de Lesbos, cada vez más mujeres que perdieron su empleo durante la crisis se unieron a la cooperativa de mujeres. Este aumento en el número de afiliaciones les dio la oportunidad de aumentar su producción y ampliar su red. Se aprovechan de las naranjas producidas en la zona, que permanecieron sin usar en los años anteriores, para hacer postres y mermeladas.


También utilizan 'neratzath', un tipo de agua de rosas hecho de las hojas del naranjo, para hacer cosméticos y perfumes. Hoy en día, sus productos (dulces, mermeladas, pastas, y queso) se pueden encontrar en todo el país.


Incluso en las grandes ciudades una serie de cooperativas han surgido. En Atenas se pueden encontrar las tiendas de café cooperativa Mantalaki, Pagkaki, Syggrouomeno; la tienda de Syn Allois, un importador de productos de comercio justo; el editor Ekdoseis tonelada Sinaderfon; el taller de reparación de equipo Stin Priza; y la tienda de comestibles Lacandona, entre otros. Muchas de estas tiendas operan bajo el paraguas de una red más grande, Kolektivas .


Una de las iniciativas es la ( '¿quieres leche' Tes gala ) cooperativa. La cooperativa está formada por los productores de leche desde el centro de Grecia y materiales con leche fresca de un número de cajeros automáticos 'leche' en Larisa, Atenas, y Grecia. Los consumidores pueden llenar sus botellas con leche fresca, producido hace menos de 24 horas, con un precio más barato que se puede encontrar en el supermercado. La cooperativa se inició en 2011 y, a pesar de la crisis, ahora cuenta con más de 60 puntos de venta, 50 parques, y, sobre una base diaria, que producen el 10% de la producción nacional.


Nuevos hábitos de consumo


En general, el consumo en Grecia se había reducido significativamente como resultado de la disminución de los salarios y las pensiones. Tal como se documenta por la Autoridad Estadística Helénica en 2014, el gasto promedio de consumo de los hogares se redujo en casi un 32% desde 2009.


Como respuesta a esta disminución en el consumo y los fondos disponibles, más y más tiendas de segunda mano han aparecido en las grandes ciudades. Uno de los más famosos se encuentra en el barrio de Eksarcheia; un barrio conocido por sus propiedades anti-establecimiento y el carácter anarquista. En esta tienda, se puede comerciar ropa vieja para los nuevos. 'Nuestra tienda es una respuesta al consumo excesivo, que es una de las razones que nos han llevado a la crisis actual', dijo una de las mujeres que trabajaban allí:

Hoy en día, más y más personas prefieren comprar ropa de segunda mano, especialmente si pueden intercambiarlos con algunas de las prendas que no necesitan más. Por supuesto, algunos de nuestros clientes son personas que no pueden permitirse comprar ropa nueva, pero el último año vemos más y más personas que optan por no comprar ropa nueva como una forma de vida.

En el mismo espíritu se pueden encontrar iniciativas similares de intercambio de libros, cambio de muebles, e incluso intercambio de teléfonos móviles.


Otro elemento importante de la tradición griega es el '100 kilometros regla' (antes de que se hizo famoso internacionalmente como el ' 100 millas dieta '). De acuerdo con este principio, las personas deben tratar de consumir productos que se producen dentro de 100 km de la residencia. Τhis concepto era un pilar de la dieta griega entre los años 50 y 80, sin embargo, debido al aumento de la urbanización y las horas de trabajo, y la gran variedad de productos disponibles en los supermercados, que fue sustituido por el concepto de 'fácil' y 'comida rápida' .


Recientemente, la idea del 'mercado local' tiene como objetivo traer de vuelta a esta idea. Los productores de todo el país se reúnen en un barrio diferente cada domingo y venden sus productos sin intermediarios.


En una de mis visitas en el mercado local de agricultores en mi barrio, he tenido la oportunidad de hablar con MX, un productor de queso desde el norte de Grecia. 'Debido a la crisis la gente quiere asegurarse de que compran productos locales,' me dijo. 'Cada vez más personas me dicen que evitar la compra de grandes supermercados, no sólo porque los productos son más caros, sino porque saben que, de esta manera, las marcas internacionales se aprovechan de los productores y los compradores griegos,' agregó. 'Hablo con la gente y darles toda la información que necesitan sobre mis productos. Incluso estoy dispuesto a negociar el precio cuando alguien no puede permitir!'


Grupos de solidaridad social también están creciendo rápidamente en estos últimos años. El trabajo de organizaciones como Médicos sin fronteras '', 'Médicos del Mundo', que estaban activos antes de la crisis, están ahora con el apoyo de las nuevas organizaciones de salud como los 'enfermerías sociales' (koinonika IATREIA ).


Actuando a nivel municipal, estos grupos están integrados por médicos y enfermeras que tratan a los pacientes de forma gratuita. Iniciativas similares se organizan por los farmacéuticos, profesores, e incluso cafeterías, que ofrecen una taza de café gratis a personas que no pueden pagarlo.


Por último, pero no menos importante, una serie de movimientos sociales más políticamente orientados surgió durante los tiempos de crisis como una respuesta a las medidas de austeridad y la democracia disfuncional. Las grandes protestas de 2008, el movimiento en la plaza Sundagma y el 'No pagaré movimiento' ( Kinima den Pliróno ) son algunos ejemplos. Plazas y público ocupado y edificios privados se transformaron en los sitios de contestación política y movilización.


A partir de 'una manera de vivir' a una forma de 'ganarse la vida'


Los ejemplos anteriores ilustran una tendencia incrementada alrededor nichos de los movimientos sociales que puede formar un modelo alternativo de crecimiento, basado en la solidaridad, la cooperación y el respeto mutuo. Muchas de estas iniciativas forman parte de la tradición que tiene sus raíces en la cultura griega que no se desvaneció por completo en la vida moderna.


Esto puede ofrecer una ventaja comparativa potencial hacia una transición a un modelo de decrecimiento, ya que muchas de las ideas que encarna este modelo no son nuevas ni extraño a la sociedad griega.


Por supuesto, estos ex sociedades tradicionales tenían una serie de limitaciones (por ejemplo, el racismo, la xenofobia) que no están en línea con las ideas del movimiento por el decrecimiento invoca. Por lo tanto, es esencial para aprender del pasado y mantener los elementos positivos que pueden allanar el camino para una nueva manera de vivir.


Estas ideas se están popularizando principalmente como una alternativa a la crisis económica; Sin embargo necesitan para formar 'una manera de vivir' en lugar de una forma de 'ganarse la vida'. Hoy en día, muchas de las personas que optan por comprar en las tiendas de segunda mano o para visitar el mercado de los agricultores son impulsados por la necesidad. Por el contrario, esta actitud debe crecer en una mentalidad fundamental.


La mayoría de las personas que tenía la oportunidad de entrevistar a recordar que, en los últimos años, se observó un cambio en la actitud de las personas, principalmente a causa de la crisis en curso que hace muchos cuestionan el éxito del sistema actual. Pero es esto suficiente?


La respuesta es no. Esto es sólo un primer paso en un largo camino. Estas iniciativas no tendrán un impacto significativo si no son compatibles con la educación y la publicidad adecuada.


Tales instrumentos pueden fortalecer estas alternativas mediante la sensibilización que activa el interés de más personas y fomentar la formación de nuevos proyectos.


La intervención del Estado es otro factor que puede dar forma a los movimientos sociales. En el caso de Grecia, el gobierno parece ignorar la importancia de estos movimientos, ya menudo amenaza su existencia a través de aumento de los impuestos y la legislación más estricta. En la situación política actual, es casi imposible imaginar un movimiento importante que no implique el estado.


A primera vista, esto parece ser una contradicción, ya que es una creencia común que el Estado es un actor unitario, y que los movimientos sociales son una unidad separada y, a menudo en oposición al Estado.


En este contexto hay que darse cuenta de que estas iniciativas, a través de su creciente influencia, pueden tener el poder para formar un régimen político diferente que, a su vez, también transformarlas. Para utilizar las palabras de Saturnino Borras, 'actores sociales intentan influir y transformar los actores estatales, pero en el proceso se transforma a sí mismos, y viceversa.' Por lo tanto, la realización del potencial de estas iniciativas, especialmente a nivel municipal, podría ser un primer paso crucial.


Hoy en día, somos participantes en una crisis compleja y severa, y una crisis radical exige soluciones radicales. A través de una serie de ejemplos se hizo evidente que en Grecia no hay bases para una transición al decrecimiento sostenible. Hay semillas en los numerosos movimientos sociales, las acciones voluntarias, y redes de solidaridad. Lo que queda por ver es si las semillas van a florecer.


No debemos olvidar que, como Rebecca Solnit dice: 'El cambio es suele ser sencillo.


A veces es tan compleja como la teoría del caos y tan lento como la evolución. Incluso las cosas que parecen ocurrir de repente surgir de raíces profundas en el pasado o de semillas a largo latente.'


Muchas gracias a todos los entrevistados ya Brayton Noll por sus comentarios útiles.

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